Querido Martín
Siempre me gustó la carta como género, y mucho más la carta abierta. Un simple comentario en una nota escrita por mi querido amigo y hermano Martín Rasskin, motivo una extensa respuesta por su parte que contesto a su vez, quizás con la pueril intención de sumar voces a un debate que creo y creemos necesario. O lo podemos poner de otra forma: una charla privada que se hace pública, un diálogo compartido, una invitación a sentarte en la mesa con nosotros: dos tipos que nos conocemos y queremos desde hace añares, mucho antes que existieran los blogs, Internet y hasta las computadoras personales.
Así que aquí va. Si querés sumate, seguro que cuanto más seamos, mejor la vamos a pasar.
Querido hermano, hermano del alma: no sabés cuanta alegría me da que me respondas en forma de carta abierta. Hasta me reía imaginándote leyendo mi simple comentario de dos o tres líneas, mascullar algunas ideas, rascarte la cabeza y empezar a tipear fuerte para escribirme con tu pasión habitual. Eso si, no sabía si contestarte, o seguir la charla con un comentario en tu blog, desde mi blog o en un mail privado. Decidí hacerlo desde aquí para que, si a alguien le interesa y se quiere sumar, se pueda seguir desde aquí la cadena de charlas que esperemos pueda empezar. Abramos un buen Malbec...
Así que aquí va. Si querés sumate, seguro que cuanto más seamos, mejor la vamos a pasar.
Querido hermano, hermano del alma: no sabés cuanta alegría me da que me respondas en forma de carta abierta. Hasta me reía imaginándote leyendo mi simple comentario de dos o tres líneas, mascullar algunas ideas, rascarte la cabeza y empezar a tipear fuerte para escribirme con tu pasión habitual. Eso si, no sabía si contestarte, o seguir la charla con un comentario en tu blog, desde mi blog o en un mail privado. Decidí hacerlo desde aquí para que, si a alguien le interesa y se quiere sumar, se pueda seguir desde aquí la cadena de charlas que esperemos pueda empezar. Abramos un buen Malbec...
Trataré de ser breve, sabés que ando con unos días de traqueteos varios. Lo único que dije es que tratemos de no quedarnos con una sola mirada. Sólo eso. Pero ya que abrís el juego, vamos a jugar un poco. Me toca. Lamentablemente la mirada de "El país" está íntimamente asociada, y lo de la sociedad es o fue real, a la de Clarín. Y, para mi, ambos diarios, que nutrieron una buena parte de mi infancia y adolescencia, perdieron toda credibilidad. Pero no seamos ingenuos: si leés Clarín es todo un desastre y si leés Pagina 12 es todo maravilloso. Sabés muy bien que jamás me voy a embarcar en ningún dogmatismo ni nada que se le parezca. Me atraen y fascinan los grises, los matices, el trasluz.
Para serte franco, creo que sabés porque lo escribí y lo hago público sin problema, estoy muy de acuerdo con muchas medidas que tomó este gobierno. Creo que tocaron intereses y se metieron con ciertos grupos y sectores que jamás, en estos años de democracia, ningún gobierno se atrevió a tocar. Y creo también que Cristina es, por lejos, la Presidenta con mejor nivel intelectual que tuvimos en décadas. Ahora...eso no me convierte en "K". Hay cosas, como las que vos nombrás y muchas más también en las que me siento en la vereda de enfrente o, para ser coherente, en otro lugar. Tampoco eso me convierte en partidario de Magnetto, el Ceo de Clarín, o de toda la lacra opositora que tenemos. Resumiendo, no creo en el estigma Bush: Or you are with us or you are against us. Nunca me gustaron los "ismos" partidarios. No me pasó ni siquiera en el emotivo, vibrante y apasionante 1983. Soy así. Si no fuera así, sería otro.
Coincido plenamente con vos en que lo que tenemos, sea lo que sea, es fruto de esta sociedad con su particular idiosincracia y cultura. No hay que echar las culpas afuera. Eso no quita que haya habido afuera personajes nefastos que aportaron lo suyo. Kissinger es uno de ellos, por poner un nombre. ("Si lo tienen que hacer, háganlo rápido" les dijo a los milicos en plena dictadura) Pero eso no soluciona los temas de fondo y además ahora hay una situación muy distinta a la que vivimos en nuestra infancia y/o adolsecencia. ¿Cómo no voy a saber que la mayor responsabilidad está adentro? Como vos decís, vivo en la Ciudad de Buenos Aires. Y esta ciudad "culta y moderna" eligió, por el voto, al Jefe de Gobierno más facho, mediocre, inútil e incapaz que tuvo nunca la ciudad. Eso si...ahora parece que nadie lo votó. En otro sentido escribí sobre esto hace unos meses. Es cierto, está todo muy mal y desde hace años. La destrucción del país fue organizada sistemática y meticulosamente. Y dio sus resultados. Quizás un natural impulso vital me incita a ver cierto cambio, cierta vuelta de página. Pero no sé...pasame tu vaso.
Sabés muy bien porqué te dije que no me interesa Maradona. Sabés bien que lo puedo trasladar al fútbol entero. Desde el año 78 se despertó en mi un fastidio, casi te diría un odio, muy especial con el fútbol y todo su hermoso mundo. Y por más que me hablen de mil cosas, de la pasión popular, de esto y de lo otro, es más fuerte que yo... como yerba mala que no se puede arrancar. Pero repito, vos y algunos que otros más, saben bien porqué. Por cierto ¿leíste este libro? Yo todavía no, pero me divierte el hecho de pensar que alguien se atrevió a meterse con estos personajes. Por las dudas, va un aviso a los que etiquetan, esto no quiere decir que concuerde ideológicamente con su autor ni mucho menos. Y por otro lado, conozco mucha gente (vos también) que está en las antipodas de ese desprecio por la ética del trabajo, de ese narcisismo, y de esa fe en las soluciones mágicas y que se rompe el lomo todos los días laburando y estudiando, sin siquiera esperar una compensación económica sino tratando de satisfacer una necesidad personal. Una necesidad interior, como diría nuestro querido amigo. Y ni que hablar de gente como las abuelas, el equipo de antropología forense, etc. etc. No está todo perdido. No está todo arruinado. Por eso hacen falta muchas miradas, muchas ganas de hablar sinceramente, de discutir y analizar con tranquilidad y pasión todo lo que nos pasa.
Acepto el convite. Vamos a la jabonería de Vieytes y sigamos intentando cambiar, sacudir, barajar y dar de nuevo. Me emociona que lo intentemos hacer juntos. Sobre todo porque nos vamos a cagar de risa de todo como nunca, o casi, dejamos de hacerlo.
Coincido plenamente con vos en que lo que tenemos, sea lo que sea, es fruto de esta sociedad con su particular idiosincracia y cultura. No hay que echar las culpas afuera. Eso no quita que haya habido afuera personajes nefastos que aportaron lo suyo. Kissinger es uno de ellos, por poner un nombre. ("Si lo tienen que hacer, háganlo rápido" les dijo a los milicos en plena dictadura) Pero eso no soluciona los temas de fondo y además ahora hay una situación muy distinta a la que vivimos en nuestra infancia y/o adolsecencia. ¿Cómo no voy a saber que la mayor responsabilidad está adentro? Como vos decís, vivo en la Ciudad de Buenos Aires. Y esta ciudad "culta y moderna" eligió, por el voto, al Jefe de Gobierno más facho, mediocre, inútil e incapaz que tuvo nunca la ciudad. Eso si...ahora parece que nadie lo votó. En otro sentido escribí sobre esto hace unos meses. Es cierto, está todo muy mal y desde hace años. La destrucción del país fue organizada sistemática y meticulosamente. Y dio sus resultados. Quizás un natural impulso vital me incita a ver cierto cambio, cierta vuelta de página. Pero no sé...pasame tu vaso.
Sabés muy bien porqué te dije que no me interesa Maradona. Sabés bien que lo puedo trasladar al fútbol entero. Desde el año 78 se despertó en mi un fastidio, casi te diría un odio, muy especial con el fútbol y todo su hermoso mundo. Y por más que me hablen de mil cosas, de la pasión popular, de esto y de lo otro, es más fuerte que yo... como yerba mala que no se puede arrancar. Pero repito, vos y algunos que otros más, saben bien porqué. Por cierto ¿leíste este libro? Yo todavía no, pero me divierte el hecho de pensar que alguien se atrevió a meterse con estos personajes. Por las dudas, va un aviso a los que etiquetan, esto no quiere decir que concuerde ideológicamente con su autor ni mucho menos. Y por otro lado, conozco mucha gente (vos también) que está en las antipodas de ese desprecio por la ética del trabajo, de ese narcisismo, y de esa fe en las soluciones mágicas y que se rompe el lomo todos los días laburando y estudiando, sin siquiera esperar una compensación económica sino tratando de satisfacer una necesidad personal. Una necesidad interior, como diría nuestro querido amigo. Y ni que hablar de gente como las abuelas, el equipo de antropología forense, etc. etc. No está todo perdido. No está todo arruinado. Por eso hacen falta muchas miradas, muchas ganas de hablar sinceramente, de discutir y analizar con tranquilidad y pasión todo lo que nos pasa.
Acepto el convite. Vamos a la jabonería de Vieytes y sigamos intentando cambiar, sacudir, barajar y dar de nuevo. Me emociona que lo intentemos hacer juntos. Sobre todo porque nos vamos a cagar de risa de todo como nunca, o casi, dejamos de hacerlo.
Ve otro abrazo gigantesco. Abarcando a los osos de Abel y Naúm.
Tu hermano que te quiere.
Pd. Che....te tomaste todo...