La música en el Di Tella
No viví la época del Di Tella, pero siempre tuve una enorme curiosidad de saber como fueron esos días, esos años, en donde la música, y el arte en general, encontraron un lugar en Buenos Aires en donde crecer y desarrollarse. Y, sobre todo en una ciudad acostumbrada a mirar a Europa, que ese crecimiento haya sido compartido especialmente con colegas latinoamericanos que venían becados a estudiar, hace que toda esa experiencia haya sido única, casi irrepetible.
Por suerte estos tiempos que estamos viviendo apuntan más en la dirección de la reconstrucción que de la destrucción a la que estuvimos acostumbrados en las últimas décadas. Parte de esa reconstrucción es la de la historia. Sea política o artística. El Di Tella es parte de nuestra historia y este Festival que comenzó ayer, con la presencia de prácticamente todos los becarios, apunta en esa dirección: la reconstrucción de la memoria.
El poder hablar con ellos, conocer sus inquietudes y vivencias de aquellos años, saber que fue de sus vidas en los años que siguieron y escuchar sus obras, es un privilegio que tenemos hoy al alcance de la mano y que, sinceramente, no te podés perder.
Aquí podés ver toda la programación además de otras cosillas más. Va mi especial agradecimiento a José Luis Castiñeira de Dios, Micaela Gurevic, por la Secretaría de Cultura de la Nación y a Eduardo Kusnir, por haber hecho posible este momento.