No viví la época del Di Tella, pero siempre tuve una enorme curiosidad de saber como fueron esos días, esos años, en donde la música, y el arte en general, encontraron un lugar en Buenos Aires en donde crecer y desarrollarse. Y, sobre todo en una ciudad acostumbrada a mirar a Europa, que ese crecimiento haya sido compartido especialmente con colegas latinoamericanos que venían becados a estudiar, hace que toda esa experiencia haya sido única, casi irrepetible.
Por suerte estos tiempos que estamos viviendo apuntan más en la dirección de la reconstrucción que de la destrucción a la que estuvimos acostumbrados en las últimas décadas. Parte de esa reconstrucción es la de la historia. Sea política o artística. El Di Tella es parte de nuestra historia y este Festival que comenzó ayer, con la presencia de prácticamente todos los becarios, apunta en esa dirección: la reconstrucción de la memoria.
El poder hablar con ellos, conocer sus inquietudes y vivencias de aquellos años, saber que fue de sus vidas en los años que siguieron y escuchar sus obras, es un privilegio que tenemos hoy al alcance de la mano y que, sinceramente, no te podés perder.
Aquí podés ver toda la programación además de otras cosillas más. Va mi especial agradecimiento a José Luis Castiñeira de Dios, Micaela Gurevic, por la Secretaría de Cultura de la Nación y a Eduardo Kusnir, por haber hecho posible este momento.
Lo mejor que se ha dicho sobre el cuento es lo que Edgar Poe escribió en su ensayo sobre Nathaniel Hawthorne. No pienso facilitarte las cosas reproduciéndolo. Tendrás que encontrarlo solo. Un escritor es un buscador de tesoros. Los descubre o no. Esa es la única diferencia entre la biblioteca de un escritor y el mueble del mismo nombre de las personas llamadas cultas.
No intentes ser original ni llamar la atención. Para conseguir eso no hace falta escribir cuentos o novelas, basta con salir desnudo a la calle.
Cuidado con las computadoras. Todo se ve tan prolijo que parece bien escrito.
Si la palabra mercado te hace pensar “persa”, quizá no seas muy original pero todavía estás a tiempo. Si la palabra mercado te hace pensar en la venta de tu libro, no insistas con la literatura.
No te dejes impresionar porque hayan existido Dante, Cervantes o Shakespeare. Todo ocurre siempre por primera vez; también tu libro.
No defiendas tu libro argumentando que los críticos son escritores frustrados. Lo verdaderamente peligroso de un crítico es que sea un crítico frustrado.
Tal vez seas envidioso, rencoroso, un poco estúpido, avaro, mal amigo. No te preocupes. Un buen libro siempre es mejor que la persona que lo escribe.
Un albañil puede habitar la casa que construye, decía más o menos Sartre, un sastre usar el traje que ha hecho: un escritor no puede ser lector de su propio libro. Un libro es lo que los lectores ponen en él. Ningún escritor puede agregar un sentido nuevo a sus propias palabras. Si puede hacerlo, debería escribir el libro otra vez. Ser escritor. Mínimas.
El 16 de Diciembre de 1976, faltando apenas unos días para festejar la Navidad más negra que tuvo la Argentina, en medio de un salvaje e inimaginable genocidio, la revista Gente publicaba esta "Carta abierta a los padres argentinos".
Es interesante leerla y ver como era la propaganda de ese momento. Instalaron la idea de que el país estaba "en guerra" y ellos, los militares, actuaban con valor para salvar a la patria. Esa valentía se demostraba torturando hasta la muerte a miles de hombres y mujeres indefensos, saqueando y repartiendo el botín de guerra y robando bebés por poner algunos ejemplos. Además, como es lógico, pedían la colaboración de toda la sociedad (la complicidad, la delación) porque la guerra se libraba en todos las frentes. No hay que olvidarse que, como parte de esa "guerra", durante la dictadura la deuda externa pasó de 8.000 millones de dólares a 45.000, toda guita evadida con el consentimiento del Fmi y demás pilares de occidente.
Y también, la "guerra", estaba en la educación. Te rescato dos párrafos de esa carta. La amenaza del final es clarisima y no tiene ningún eufemismo ni metáfora.
"Después del 24 de marzo de 1976, usted sintió un alivio. Sintió que retornaba el orden. Que todo el cuerpo social enfermo recibía una transfusión de sangre salvadora. Bien. Pero ese optimismo por lo menos en exceso- también es peligroso. Porque un cuerpo gravemente enfermo necesita mucho tiempo para recuperarse, y mientras tanto los bacilos siguen su trabajo de destrucción. Hoy, aun cuando el fin de la guerra parece cercano, aun cuando el enemigo parece en retirada, todavía hay posiciones clave que no han podido ser recuperadas. Porque hay que entender algo, con claridad y para siempre. En esta guerra no sólo las armas son importantes. También los libros, la educación, los profesores. La guerrilla puede perder una o cien batallas, pero habrá ganado la guerra si consigue infiltrar su ideología en la escuela primaria, en la secundaria, en la universidad, en el club, en la iglesia. Ese es su objetivo principal. Y eso es lo que todavía puede conseguir. Sobre todo si usted, que tiene hijos, no está alerta.
Entienda algo y de una vez por todas. Esta guerra no es de los demás. También es suya. Si usted manda a su hijo a un colegio -religioso o laico- cumple apenas con una obligación civil. Eso no es lo más importante. Lo importante es que cumpla también con las leyes morales de su sociedad y de su cultura. ¿Cómo? No es tan difícil. Interésese por los libros que los profesores o los sacerdotes recomiendan a su hijo. Sea cauteloso ante las actividades escolares que no son estrictamente materias de promoción, como por ejemplo Catequesis o Moral. No mire con indiferencia o con absoluta conformidad otras actividades que se prestan a desviaciones: los campamentos, los encuentros de convivencia, los retiros espirituales, las visitas a villas miseria. Usted tiene una gran responsabilidad en esto. Porque usted no sabe -no puede saber- qué cara tiene el enemigo. O de qué se disfraza. Usted le entrega, le regala su hijo a la escuela durante muchas horas por día -a veces durante semanas enteras-, e ignora qué ocurre. Seguramente lo estarán educando como corresponde. Pero cabe la posibilidad de que no sea así. Y un día, cuando su hijo empieza a discutir con usted, cuestiona sus puntos de vista, habla de “brecha generacional”, afirma que todo lo que aprende en la escuela es bueno y todo lo que aprende en la casa es malo o está equivocado, ya es demasiado tarde. Su hijo está hipnotizado por el enemigo. Su mente es de otro. De allí a la tragedia hay un corto y rápido paso. Si eso ocurre y un día usted tiene que ir a la morgue a reconocer el cadáver de su hijo o de su hija, no puede culpar al destino o a la fatalidad. Porque usted pudo haberlo evitado."
Lindo, no? Lo curioso de esta carta es que es anónima. La firma "Un amigo". Pero todos sabemos que hay una norma no escrita que dice que las notas no firmadas son la editorial, la línea ideológica de esa publicación. ¿Y quien era el director de Gente en esos años? Nuestro amigo Chiche Gelblung, hoy periodista al servicio de un famoso medio de comunicación.
Aquí te dejo este link por si la querés leer entera. Por mi parte, con amigos así, prefiero cien años de soledad.
No recuerdo exactamente cuando lo conocí a Jorge. Tengo la sensación que fue "hace mucho" y seguramente es así, aunque quizás me parezca mucho más de lo que realmente fue. Lo que si recuerdo es como poco a poco lo fui conociendo y como su presencia fue mutando de respeto a simpatía, de simpatía a afecto y de afecto a gran cariño.
Hay algo que recuerdo, que tengo bien presente y que, me parece, lo pinta de cuerpo entero. En un medio donde siempre hubo, y habrá, tantas vanidades y tanto ego, él siempre fue solidario y estuvo presente en cuanto concierto hubiera por ahí, por más que no hubiera en el programa una obra suya. Creo que estuvo en la mayor parte de las actividades que vengo organizando desde el año 2000 en adelante, siempre dispuesto a acercarse, junto a Judith, a conversar al final del concierto. a hablar, arreglar un encuentro o simplemente a saludar, a decirte "aquí estoy". Y, por supuesto, también estuvo en las actividades que organizaron otros colegas.
Su música merece otro tipo de comentario, quizás más detenido, quizás un poco más reflexivo de lo que te puedo transmitir ahora. Garabateando algunas líneas te diría que su música es siempre fresca, siempre sorprendente de una obra a otra y, lo más importante, siempre capaz de transmitirte emoción, de generarte un estímulo, ideas...una música movilizadora en el sentido profundo de la palabra.
En Junio de 2009, hicimos desde el CEIArtE el Simposio EMS09. Como entre las actividades iba a haber un concierto, no dudamos con Ricardo Dal Farra, en invitar a Jorge a que presentara una obra, la que él quisiera. Nunca nos imaginamos que esa iba a ser su última presentación en público.
Hoy, la tenemos para compartir. No es mucho lo que hay para ver y el audio podríamos haberlo mejorado mezclándolo con audio de línea. Pero preferimos dejarlo así, como si estuviéramos en la sala escuchando y viendo a Jorge, una vez más, haciendo sutiles retoques en la consola para darle espacialidad a su obra.
Va este pequeño homenaje para un gran compositor, una excelente persona y un querido amigo.
Un día después de los festejos del bicentenario, el año 201, Mempo Giardinelli publica una nota que vale la pena leer y saborear, escrita casi desde el mismo lugar de la celebración en Resistencia, provincia de Chaco.
Te adelanto un párrafo
"Durante todo el acto yo pensaba, sobre todo, en nuestra democracia. ¿Qué hacía yo ahí, cuando hace sólo 30 años estaba en el exilio y este país era una carnicería? Y pensaba en mis amigos que odian a Cristina y al Gobierno. Yo me siento incapaz de odiar. Ni siquiera odié a los milicos durante la dictadura. Los enfrenté como medio país, pero no los odié. Es un sentimiento mediocre el odio. Degrada al que odia, más que al odiado. Y además, cosa curiosa, aquí los que odian son los ricos. Por algo será, me dije, aunque sé que la frase es lamentable. Pero es lo que sucede: los ricos más ricos son los que más odian. En el Chaco es así. En la Argentina toda"
Todo un tema el del odio, especialmente en la historia argentina. Pero la nota no se centra en eso. Yo tampoco. La podés leer completa desde aquí
Hoy, sábado 14 a las 19hs, estreno la obra "Ecos de otro tiempo" para cello y electroacústica. Esta obra me la pidió hace un tiempo mi amigo el cellista y compositor Ricardo de Armas, y hoy la va a estrenar él haciendo una interpretación que te caes de espalda.
El encuentro es en el Centro Cultural Recoleta, en el Festival Tsonami, evento que vienen haciendo contra viento y marea una banda de amigos y colegas que tienen tanta energía como buena onda.
Espero poder subir pronto algo de material, video o grabación para compartirla por si estás lejos o por si no podés venir. Si venís, por supuesto, mucho mejor!
Mayo viene con todo. Mucha actividad. Te cuento lo de mañana, Sábado 7 . Un grupo de personajes varios vamos a estar en el Centro Cultural Recoleta haciendo una mesa redonda (que en realidad es más bien rectangular) llamada "Electroacústica, la seducción de una música invisble: cita a ciegas y amor a primera escucha" ¿Que tal? ¿Venís?
La cita es a las 18hs y vamos a estar con Jorge Sad, Daniel Schachter, Claudio Alsuyet, Teodoro Cromberg y Javier Leichman. En una de las aulas del Lipm, Laboratorio de Investigación y Producción Musical.
Si nunca fuiste, es una buena excusa para visitarlo. Y de paso visitarnos. Seguro que la pasamos bien. Te esperamos!
No estoy capacitado para medir las consecuencias de este hecho histórico. Pero no te voy a ocultar la verdad por más dura que sea: Superman quiere renunciar a su ciudadanía estadounidense harto de ser usado como instrumento político. Más abajo va la prueba.
No se porqué tengo un extraño y viejo impulso de tratar de entender algunas cosas. Perdón, me expresé mal. Quiero decir porqué sigo insistiendo en entender cosas que son inentendibles. Al menos para mi claro. A lo mejor vos, con tu mirada más certera y precisa me ayudás a entender ciertas dudas que me acosan cual maniaco agazapado a la vuelta de la esquina.
Empecemos por el principio. Los Estados Unidos mataron a Bin Laden. Al menos eso dicen. Al menos eso festejan. Sin embargo en todos los medios de todo el mundo (que exagerado...) hablan de la "muerte" de Bin Laden. Es cierto, muerto está. Pero si lo mataron ¿no sería correcto decir "el asesinato" de Bin Laden? Ya se. No es para ponerme pesado con cuestiones gramaticales. Pero no entiendo. ¿Será que porque lo mató el comandante Philips Morris mientras bebía su Coca Cola y escupía su goma de mascar, no es un asesinato? ¿o hay asesinos buenos y malos? No sé. ¿que diría Boogie de todo esto? De que oímos hablar desde hace cuarenta mil años ¿del asesinato de Kennedy o de la muerte de Kennedy?
Después está el tema del cadáver. Nos dicen que lo arrojaron al mar siguiendo un rito musulmán. A ver, imaginate la escena. Los tipos entran a su bunker mansión y, después de un heroico combate (siempre es heroico), lo matan. Entonces van y le preguntan a los demás que estaban con él: "Che, ¿que onda? ¿van a hacer algún velorio?" Y los otros les dicen: "Si dejá, no se calienten que nosotros vamos a hacer algo acorde a nuestra religión que ustedes tanto respetan" Y los otros, los que mataron, dicen: "Bueno, listo" Y se van, respetuosamente, sin sacarle siquiera una foto no sea que alguien se vaya a ofender. Suena raro. No me digas. Suena raro, no?
Pero la cosa no termina ahí. Obama, que no es Osama, dice "Ahora la tierra es un lugar más seguro" Y en el mismo instante levantan las alertas de seguridad en medio mundo. ¿No es al revés? ¿No es que cuando estás más seguro bajás el estado de alerta? ¿No conocés algún psicologo/a que me explique?
Y ya que digo Obama, ay como me cuesta escribir ese nombre, no es un poco raro que un premio nobel de la paz se alegre de una muerte, digo de un asesinato? ¿no sería mejor que hubiera sido enjuiciado y, a lo mejor, los eeuunenses podrían obtener información acerca de todas las sedes y sub sedes de al qaeda? No se. Y otra cosa ¿cuantas muertes de inocentes civiles hubo en Libia, Irak y que se yo cuantos otros países más desde que éste nobel de la paz está en el gobierno? Un poco más de dos o tres, no?
No se, mientras más escucho todas estas cosas, más raro me suena todo. Y por supuesto menos entiendo, lo cual ya es decir. Tirame una idea por favor. Sino me vuelvo a componer ya mismo. Después dicen que hay música rara...
Creo que no hay mejor forma de homenajearlo que leerlo. En estos momentos en que vamos a estar inundados de palabras, todas necesarias claro que si, me parece mejor quedarme callado y saborear un poco sus palabras.
Esta entrevista se hizo en el excelente programa "A fondo" que emitía la televisión española allá por los años 76 - 77, años terribles para la Argentina. Va aquí una parte. Vale la pena verlo y asomarse a ver los gestos de un grande que nunca perdió su humildad.
El campo del intelectual es por definición la conciencia. Un intelectual que no comprende lo que pasa en su tiempo y en su país es una contradicción andante y el que comprendiendo no actúa tendrá un lugar en la antología del llanto pero no en la historia viva de su tierra.
Mucho se habló últimamente de Ryan Larkin, sobre todo a partir de la nominación al Oscar del corto-documental-de animación sobre su vida, llamado Ryan.
Este artista canadiense, fallecido en 2007, se definía a si mismo como alguien que "pintaba, hacía esculturas y a veces alguna película de animación". Fue un artista que trató de mantener su independencia por encima de los intereses de la industria, con todo aquello que lo rodea incluyendo premios y nominaciones.
Va aquí la última obra que, como animador, pudo terminar: "Street Musique" del año 1971. Si si...diez años antes de la era digital. Que la disfrutes!
No hay nada que hacer. Ya nada es lo que era y difícilmente vuelva a serlo. No solamente el estado de bienestar. El imperialismo, el colonialismo o el saqueo, llamalo como quieras, está en crisis. Crisis fulminante e inimaginable hace unos años.
¿Te parece que exagero? Mirá lo que hizo el Presidente Checo Václav Klaus (no sé como se pronuncia pero así seguro que no) en su visita a Chile. Lo raro es que antes pasó por estas tierras y se portó bastante bien. ¿O será que nuestras lapiceras no son tan buenas como la de nuestros hermanos chilenos? ¿O será que aquí no lo filmamos tanto?
En fin. Me pregunto que diría Kundera de esto. No tengo idea. Decime vos.
Hoy, 3 de Abril, se cumple un aniversario importantísimo, digno de celebrar en solitario, en pareja o con amigos: el 119 aniversario de la creación del helado sundae. Es algo así como una bola de helado, no muy grande, que se suele servir con caramelo, dulce de leche u otras variantes, todas nutritivas por cierto. La muerte de Brahms, la fundación del Club Boca Juniors o el nacimiento de Marlon Brando son nada comparable a este hecho fundacional en la historia de las sobremesas.
Gracias a estas efemérides que aparecen cuando abro el famoso buscador, me enteré, tomé conciencia, de una gran cantidad de aniversarios con los cuales quedé bien en numerosas reuniones y eventos sociales a los que suelo asistir. Si es que hay helado sundae, por supuesto.
La única efeméride que no me enteré por google es la del 24 de Marzo. Es decir, había una efeméride que no me acuerdo cual era, pero no se mencionaba el inicio de la sangrienta dictadura o el "día de la memoria", como lo llamamos ahora.
Está bien, nadie se puede acordar de todo. Para acordarse de algunas cosas hay que olvidarse de otras. Pero es bueno saber que cosas elige acordarse y olvidarse alguien a quien vemos todos los días. Aunque sea una empresa, casi anónima, como google.
En fin, no quiero arruinar ningún festejo. Me voy a darle al sundae antes que se derrita.
Soy compositor, músico, dedicado fundamentalmente a la música electroacústica, docente, y con intereses varios entre los cuales están la literatura, el cine y, por supuesto, la buena comida, la buena bebida y los viajes.