viernes, 5 de enero de 2007

Entrevista - Cecilia Rojo


Realizada el
25/08/06 y publicado en http://ceciliarojo.tk/

CR-¿Cómo encontrás Sonoimágenes 2006?
RM- Muy bien, estamos muy contentos, hay mucha cantidad de público y gran variedad de propuestas: de música mixta, con instrumentos regionales, sonidos electroacústicos, videos, instrumentos electrónicos antiguos, instrumentos electrónicos modernos, una gran variedad.

CR-¿Cuánto hace que estás en Sonoimágenes Raúl?
RM-Bueno, Sonoimágenes fue creado en el año 2000 y lo fundamos Susana Espinosa, Daniel Schachter y yo y desde entonces, venimos trabajando firmemente para que esto crezca y sea cada vez más una propuesta abarcativa.

CR-¿De aquel S.I inicial a ésta de hoy, como la ves?
RM-En ese momento…la gran diferencia que había con la de ahora, es: primero, una claridad en lo que queremos, tenemos más claro hacia donde vamos, qué es lo que estamos buscando y por otro lado, el lugar que tiene, el reconocimiento internacional y a nivel nacional. Cada vez nos llegan más propuestas de países cercanos, países lejanos... Ya tenemos propuestas para el año que viene de Chechenia, Eslovenia, lugares no centrales y gente nueva que quiere simplemente venir o estar con nosotros.
Esto es reflejo del gran crecimiento que hemos dado en estos siete años, un festival que ya está instalado, insertado a nivel internacional.

CR-¿Contanos un poco qué repercusión tiene S.I en relación a esto último que dijiste, en Argentina?
RM-¿Con respecto a la calidad?

CR-Sí, sí. ¿La música argentina puede competir con otros países?
RM-La música argentina, siempre, siempre fue muy reconocida a nivel internacional. Es una música que tiene sus orígenes hace unos cincuenta años aproximadamente y siempre se destaca tanto en los Concursos como en los Festivales internacionales.

CR-Contanos algo más. ¿Ésta promoción de jóvenes, es realmente enriquecida o se enriquece con el aporte de otros medios?
RM-Sí, supone todavía, que falta una cierta decantación, para saber bien que va a quedar de todo esto. Hay un cambio muy grande al que había, cuando por ejemplo, yo era estudiante. Hay mayor acceso a muchísimas cosas que antes yo no tenía: a través de Internet, a través de montones de cosas, pero hay que ver cómo esa información se convierte en conocimiento y también, como ese conocimiento se transforma en un medio de expresión artística. Hoy si bien podemos decir que a pesar de que en la Universidad de Lanús no tenemos una carrera de composición propiamente dicha, estamos viendo por lo que nos llega de distintos lugares y por las inquietudes que hay, hay jóvenes que van a empezar seguramente un camino muy digno para ellos.

CR-¿Crees que hace falta mayor inversión en éste campo?
RM-Uno nunca puede decir que lo que tiene es suficiente ¿verdad? Pero hace falta, desde nuestra universidad mismo tanto como de otras universidades, poder hacer un sistema, no solamente como el del festival, sino también encarar proyectos que incluyan poder dar residencias a estudiantes que vengan del interior, también un espacio para experimentación con tecnología... Hay cierto temor a invertir en experimentación. Creo también que podemos buscar un sistema para ampliar la base y poder brindar a los artistas que intervienen tanto del exterior como nacionales y hacer becas para los jóvenes que han investigado y quieran componer.

CR-Este centro nos pareció precioso para el público. ¿Cubrió las expectativas de Uds.?
RM-Sí, sí absolutamente. Tiene las dificultades lógicas porque nosotros lo inauguramos con el primer concierto de Sonoimágenes, entonces hay cosas que no se sabían hasta estar en el concierto. Si bien hay cosas que uno puede decir: esto me gustó, esto no, no había forma de chequearlo antes para ver como andaba, entonces creo que para el año que viene, seguramente, esos pequeños detallecitos van a estar superados y va a ser una sala “impecable”.

CR-Sabemos que sos docente también; quisiera preguntarte acerca de esos elementos de composición que se advierten en los jóvenes, ¿qué es lo que más les gusta a ellos o eligen?
RM-A ver…es una pregunta difícil de contestar. No veo una línea muy marcada que les gusta a ellos “por suerte”, veo que están probando, que están experimentando, que toman de donde pueden y creo que es responsabilidad nuestra de los que estamos insertos en un determinado camino, el mostrarles todas las variedades posibles. Creo que lo peor que puede hacer un docente si quiere ser docente en un ámbito artístico, es decir: ¡éste es el camino!, todos los caminos son múltiples y hay que mostrar una gran variedad para que los alumnos vayan eligiendo cual es el camino que le gusta o los caminos que les gusta.

CR-Sabemos que tenés una alta actividad profesional, y en ese sentido para los que estamos en la música, ¿qué significa para Raúl, el arte de componer?
RM-Fundamentalmente, es un medio de expresión, o sea es un impulso, hay momentos en donde necesito leer, escuchar música como un proceso de alimentación y después por necesidad uno empieza a probar a buscar hacer cosas y yá es un impulso a querer construir, a querer decir algo, a querer decir cosas que por ahí las puedo decir de otra forma, no solamente con sonidos. Por eso creo un poco que lo más gratificante que puede recibir alguien…no digo que le guste, eso es otra cuestión, pero cuando uno muestra o dice alguna cosa, tener una devolución: si me gustó o no me gustó, me pareció qué… me emocionó…esas son cosas que uno puede compartir acerca de lo que hace, con otra gente.

CR-¿Se podría decir en éste sentido que vale todo para la expresión?
RM-Hay varios niveles. Lo que vale fundamentalmente es la necesidad de comunicar o,
básicamente, comunicar a través de un discurso. En cuanto a los medios utilizados, sí por supuesto vale todo…el asunto es que hacer con eso, qué hacer con todos los medios disponibles, cómo construir una sonoridad, cómo construir un discurso.

CR-Sobretodo por lo que uno recibe de los alumnos, a veces se piensa que grabar los sonidos es tener la capacidad de poder crear música y de componer. ¿Es así realmente?
RM-Un sonido es…poder hacer cualquier cosa, uno puede grabar algo de Internet, puede salir con el grabador a la calle y grabar cualquier cosa. El asunto insisto, es saber qué hacer con eso. Yo pongo siempre el mismo ejemplo: las dos notas de la quinta sinfonía de Beethoven (sol, sol, sol, mi) capaz que se le ocurría a cualquier otro... no es una idea brillante esas cuatro notas de las cuales tres son repetidas; el asunto es saber que hacer con eso después y Beethoven hizo toda una sinfonía! Grabar un sonido, tenerlo limpio es el primer paso, después hay que ver cómo con ese primer paso uno va construyendo otras cosas.

CR-Te voy a comprometer un poco con la respuesta teniendo en cuenta que hoy, Viernes es la última jornada y está pronto a terminar el festival ¿Qué te gustó más o cautivó tu atención en Sonoimágenes 2006?
RM-Esa es una pregunta interesante. Teniendo en cuenta que como estoy a cargo de la programación, yo como otros en la programación, hemos tomado una decisión que creo que es muy sana: No programar solo lo que nos gusta a nosotros, porque sino sería una réplica de nuestra propia estética. Tratamos de programar la mayor variedad de cosas posibles, que estén bien hechas aunque no necesariamente coincida con lo que a mí me gusta, pero por ahí a otro público le puede gustar… entonces hay muchas cosas que se han pasado que no me gustan, pero fueron aceptadas porque estaban bien hechas, y por supuesto hay otras que a mi sí me gustan. Como dije anteriormente no programo lo que a mí me gusta, se intenta que haya mucha variedad de elementos posibles para que el público tenga una mayor libertad a la hora de poder elegir y que piense porqué algo le gusta y porque no.
A mí particularmente me gustaron ciertas cosas, otras no por supuesto. Me gustaron muchas de las obras que se presentaron el Miércoles, obras chilenas, particularmente la obra de José Miguel Candela, una obra muy intimista- del concierto del día jueves me gustó mucho el trío “The Electronic Hammer”, me gutó la fuerza que ponía en la interpretación, me gustó mucho la obra de Daniel Schachter, la obra de Rajmil Fischman: muy breve, muy cortita y con un carácter cómico que es poco habitual en la música electroacústica.
¿El tema sabes cual es Cecilia?...yo tengo ganas de venir a éste Festival y estar como público porque como organizador, a veces pensamos veinte cosas, ¡más que en las propias obras!. Yo estoy a veces pensando que pasa con la gente, que pasa con esto, que pasa con lo otro. Hay también cosas que intento recordar que están en eclipse pero me voy acordando, el Martes por ejemplo me gustó mucho la obra de Fabián Luna interpretada por Saúl Martín en flauta, o sea…hay cosas muy lindas, otras no tanto pero bueno no se trata de si a mí me gustó o a vos no te gustó sino de tener una gran variedad de propuestas.

CR-¿Raúl que pensás acerca del papel que cumple el músico “tocando en vivo” con respecto al trabajo que se realiza en acusmática o multimedial?
RM-Bueno…por un lado, para el público siempre va a ser más atractivo ver al músico sobre un escenario que no verlo, esto es ya una tradición de años. No tenemos un auditorio que no mire hacia el escenario, simplemente uno se sienta mirando hacia adelante y si no ve nada, entonces llama la atención.
Por otro lado, tiene también el atractivo del elemento humano que está en ese momento tocando: puede salir bien, puede salir mal... Lo que pasa que en el lenguaje para que se integren los instrumentos con los sonidos electrónicos, eso va a depender de la habilidad y las ganas de cada compositor. Yo particularmente, no trabajé hasta ahora en obras mixtas o sea con instrumentos y sonidos electroacústicos. Yo siempre me sentí más cómodo trabajando con sonidos en la computadora y tocándolos o grabándolos.

CR-Comentanos Raúl que vas a presentar hoy en Sonoimágenes especialmente para el público que viene por primera vez?
RM-Lo que hice para el trabajo de hoy y por razones puramente personales yo necesitaba componer algo distinto de lo que venía haciendo hasta ahora y quería buscar una fuente de inspiración que no podía encontrar en un lugar, hasta que me topé con la música de Gesualdo, música que yo conozco, pero como uno de esos personajes con los que uno se reencuentra diciendo: ¡ah Gesualdo! ¿mirá vos?. Es literalmente mi visión de los motetes de Gesualdo, todos los elementos están allí. A veces se reconocen a veces no, a veces se transforman pero no se transforman muchísimo, no quise hacer una especie de pirueta que se transformara, sino que hay siempre un elemento vocal que está constante. O sea, que a veces se escucha mas el canto, a veces menos y tiene elementos tonales y muchas disonancias que pueden sobrevivir a una tonalidad.

CR-¿Pensaron en la posibilidad de llevar S.I 2006 con el éxito que está teniendo al extranjero?
RM-Eso lo venimos haciendo hace bastante, en realidad como es un ciclo que tiene varios días también lo hemos presentado en varios lugares: en Santa Fé, en Córdoba, tenemos una propuesta muy atractiva para ir al Chaco, lo hemos hecho en el exterior también, ahora en Octubre voy a ir a Chile a llevar una presentación de S.I. Lo hemos llevado a distintos países de Europa como Inglaterra y Francia, así que esto se hace. Depende también de condiciones presupuestarias o el espacio que ocupa el tiempo de programación.

CR-Para todos aquellos que están interesados en S.I ¿cubrió las expectativas de Uds., las superó?
RM-Sí, sí ampliamente, tenemos mucha variedad, muchas propuestas atractivas así que realmente las superó y estamos muy contentos. Quiero aclarar algo, la convocatoria es absolutamente abierta. Hay una página que es
www.sonoimágenes.netfirms.com allí notificamos la convocatoria que tiene un plazo y todo el que quiere puede presentar una obra. Luego como toda convocatoria, la obra es aceptada o no por distintos motivos pero todo el mundo puede presentarla, hay que esperar a ser invitado. Por lo general la convocatoria se lanza en Marzo y dura hasta Mayo aproximadamente dos o tres meses cuya presentación puede enviarse por correo electrónico y luego continuar las vías administrativas.

CR-Para ir concluyendo entonces y recordar lo expresado al principio, ¿quiénes formarían el equipo de Sonoimágenes?
RM-El equipo lo conformamos Susana Espinosa, Daniel Schachter y yo. La idea es ampliar el equipo para que entren otras personas pero no sabemos todavía quiénes serían o qué función cumplirían. Pero necesitamos dentro de la universidad que el equipo se amplíe porque el festival cada vez crece más y no podemos absorber tres personas, todo. Hay algo importante que quisiera decir, que es que Sonoimágenes no sería posible sin cinco personas más que son las tres secretarias: Mariana Insua, Mariana Bajic y Sandra Villafañe, más los asistentes técnicos que son en realidad asistentes técnicos en la UNLA y responsables técnicos del festival que son Esteban Bernal y Marcelo Le Rose. Trabajan muchísimo y yo confío absolutamente en ellos y aparte tienen muy buena predisposición y sin ellos sería imposible.

CR-¿Querés agregar algo más Raúl?
RM-Solo agregar que estan todos invitados a participar en Sonoimágenes. Hay lugar para todos. Gracias.